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Domingo 30 de Marzo de 2025
marzo 30
Reflexión: 3 Pasos para Vivir el Evangelio Diario
Domingo 30 de Marzo de 2025
Evangelio: Lucas 15, 1-3. 11-32
IV Domingo de Cuaresma
Saludo y Presentación Inicial
¡Hola! Bienvenido a 3 Pasos para Vivir el Evangelio Diario. Hoy el Evangelio nos regala una de las parábolas más conmovedoras: la del hijo pródigo. Un joven que se aleja de su padre, malgasta su vida y, cuando todo le falla, decide volver. Su padre, lejos de rechazarlo, lo recibe con amor y lo restaura.
Esta historia nos muestra el corazón misericordioso de Dios. Pero también nos confronta: ¿somos como el hijo menor que se aleja? ¿O como el hermano mayor que no comprende la misericordia? Reflexionemos con tres pasos concretos para vivir este Evangelio.
Lectura del Evangelio: Lucas 15, 1-3. 11-32
En aquel tiempo, se acercaban a Jesús los publicanos y los pecadores para escucharlo; por lo cual los fariseos y los escribas murmuraban entre sí: “Éste recibe a los pecadores y come con ellos”.
Jesús les dijo entonces esta parábola: “Un hombre tenía dos hijos, y el menor de ellos le dijo a su padre: ‘Padre, dame la parte de la herencia que me toca’. Y él les repartió los bienes.
No muchos días después, el hijo menor, juntando todo lo suyo, se fue a un país lejano y allá derrochó su fortuna, viviendo de una manera disoluta. Después de malgastarlo todo, sobrevino en aquella región una gran hambre y él empezó a pasar necesidad. Entonces fue a pedirle trabajo a un habitante de aquel país, el cual lo mandó a sus campos a cuidar cerdos. Tenía ganas de hartarse con las bellotas que comían los cerdos, pero no lo dejaban que se las comiera.
Se puso entonces a reflexionar y se dijo: ‘¡Cuántos trabajadores en casa de mi padre tienen pan de sobra, y yo, aquí, me estoy muriendo de hambre! Me levantaré, volveré a mi padre y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo. Recíbeme como a uno de tus trabajadores’.
Enseguida se puso en camino hacia la casa de su padre. Estaba todavía lejos, cuando su padre lo vio y se enterneció profundamente. Corrió hacia él, y echándole los brazos al cuello, lo cubrió de besos. El muchacho le dijo: ‘Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo’.
Pero el padre les dijo a sus criados: ‘¡Pronto!, traigan la túnica más rica y vístansela; pónganle un anillo en el dedo y sandalias en los pies; traigan el becerro gordo y mátenlo. Comamos y hagamos una fiesta, porque este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida, estaba perdido y lo hemos encontrado’. Y empezó el banquete.
El hijo mayor estaba en el campo y al volver, cuando se acercó a la casa, oyó la música y los cantos. Entonces llamó a uno de los criados y le preguntó qué pasaba. Éste le contestó: ‘Tu hermano ha regresado y tu padre mandó matar el becerro gordo, por haberlo recobrado sano y salvo’. El hermano mayor se enojó y no quería entrar.
Salió entonces el padre y le rogó que entrara; pero él replicó: ‘¡Hace tanto tiempo que te sirvo, sin desobedecer jamás una orden tuya, y tú no me has dado nunca ni un cabrito para comérmelo con mis amigos! Pero eso sí, viene ese hijo tuyo, que despilfarró tus bienes con malas mujeres, y tú mandas matar el becerro gordo’.
El padre repuso: ‘Hijo, tú siempre estás conmigo y todo lo mío es tuyo. Pero era necesario hacer fiesta y regocijarnos, porque este hermano tuyo estaba muerto y ha vuelto a la vida, estaba perdido y lo hemos encontrado’”.
Palabra del Señor. R. Gloria a ti, Señor Jesús.
4. Momento de Reflexión: Invitación a Vivir los 3 Pasos
Paso 1: Reconoce tu necesidad de volver a Dios
El hijo menor pensó que sería feliz lejos del padre, pero terminó en la miseria. Solo cuando reconoce su error, decide volver.
Imagina… A un hombre que se ha alejado de la fe por años. Ha buscado felicidad en placeres pasajeros, pero solo encuentra vacío. Un día, al recordar su infancia en la Iglesia, siente el deseo de regresar.
Pregunta para ti: ¿Reconoces tu necesidad de volver a Dios o sigues alejándote en cosas que no llenan el corazón?
Paso 2: Acércate con confianza al Padre
El hijo pródigo tenía miedo de que su padre lo rechazara, pero al dar el primer paso, descubre que su padre ya lo esperaba con los brazos abiertos.
Imagina… A una mujer que lleva mucho tiempo sin confesarse por vergüenza. Un día decide hacerlo y experimenta el amor sanador de Dios como nunca antes.
Pregunta para ti: ¿Te acercas a Dios con confianza, o el miedo y la culpa te detienen?
Paso 3: Vive la misericordia con los demás
El hermano mayor no entendía la alegría del padre. A veces, nos cuesta aceptar que Dios es bueno con todos, incluso con quienes han fallado.
Imagina… A una persona que siempre criticaba los errores de los demás. Un día, al ver cuánto Dios lo ha perdonado, decide cambiar y tratar con más misericordia a quienes lo rodean.
Pregunta para ti: ¿Eres generoso en perdonar y alegrarte por la conversión de otros, o te comportas como el hermano mayor?
Conclusión
Hoy, Jesús nos invita a dar tres pasos para vivir la misericordia de Dios: Paso 1: Reconoce que necesitas volver a Él.
Paso 2: Acércate con confianza, sin miedo ni vergüenza.
Paso 3: Vive la misericordia con los demás.
Reconoce, Acércate y Vive. Así experimentaremos y reflejaremos el amor del Padre.
Despedida Final
Que la escucha de la Palabra de Dios se convierta en una bendición para toda tu jornada. ¡Hasta la próxima!
¿Qué es 3 Pasos para vivir el Evangelio Diario?
Es un espacio diseñado para acompañarte en el hermoso desafío de descubrir tu vida como un camino. Cada día nos encontramos ante la oportunidad de avanzar y este podcast busca ser una guía basada en la Palabra de Dios para dar tres pasos concretos hacia nuestra meta final: estar con Él.
Con reflexiones claras y accesibles exploramos juntos el Evangelio, desglosándolo en pasos prácticos que te ayuden a vivir más plenamente tu fe. Este esfuerzo no es solo un momento de escucha, sino una invitación a caminar juntos cada día al encuentro con Dios