Tres pasos para vivir el Evangelio Diario

Lunes 13 de Enero de 2025

Ciclo C – I Semana del Tiempo Ordinario
Primera Lectura Hebreos 1, 1-6
Salmo 96
Evangelio Marcos 1, 14-20

Introducción a la Reflexión del Evangelio

Este lunes, el Evangelio de Marcos, capítulo 1, versículos 14 al 20, nos presenta el inicio del ministerio público de Jesús. Después de la detención de Juan Bautista, Jesús comienza a predicar en Galilea, anunciando la cercanía del Reino de Dios y llamando a sus primeros discípulos. Es un llamado radical a seguirle, a dejar todo atrás y a confiar en su misión. Este pasaje nos invita a cuestionarnos sobre nuestra propia disposición a seguir a Jesús, renunciando a lo que nos impide avanzar en nuestra vida de fe.

Lectura del Evangelio

Del santo Evangelio según san Marcos: 1, 14-20

Después de que arrestaron a Juan el Bautista, Jesús se fue a Galilea para predicar el Evangelio de Dios y decía: “Se ha cumplido el tiempo y el Reino de Dios ya está cerca. Conviértanse y crean en el Evangelio”.

Caminaba Jesús por la orilla del lago de Galilea, cuando vio a Simón y a su hermano, Andrés, echando las redes en el lago, pues eran pescadores. Jesús les dijo: “Síganme y haré de ustedes pescadores de hombres”. Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron.

Un poco más adelante, vio a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, que estaban en una barca, remendando sus redes. Los llamó, y ellos, dejando en la barca a su padre con los trabajadores, se fueron con Jesús.

Palabra del Señor. R. Gloria a ti, Señor Jesús.

Momento de Reflexión

Ahora, los invito a reflexionar sobre lo que este pasaje nos enseña y cómo podemos aplicar estos pasos en nuestra vida diaria.

Paso 1: Escuchar el llamado de Jesús

El llamado de Jesús es claro y directo: “Venid en pos de mí”. Jesús nos invita a dejar lo que nos impide seguirle, a confiar en Él para llevarnos a una vida más plena.

Pensemos en: Una persona que, después de recibir una invitación a unirse a una causa noble, deja atrás sus propios intereses y se dedica a servir a los demás.

Pregúntate: ¿Estás dispuesto a escuchar el llamado de Jesús y dejar lo que te aleja de Él?

Paso 2: Dejar lo que nos ata

Los primeros discípulos, al escuchar la invitación de Jesús, dejan todo lo que tenían, incluso a su propio padre, para seguirle. Esta es una decisión radical que implica confianza total en Jesús.

Pensemos en: Un joven que decide cambiar de ciudad para estudiar lo que realmente le apasiona, a pesar de las dificultades y sacrificios que eso conlleva.

Pregúntate: ¿Qué cosas estás dispuesto a dejar atrás para seguir más de cerca a Jesús y su misión?

Paso 3: Convertirse en discípulo activo

Seguir a Jesús implica no solo caminar con Él, sino también participar activamente en su misión. Los discípulos no solo lo siguieron, sino que se convirtieron en “pescadores de hombres”, extendiendo el mensaje de salvación.

Pensemos en: Una persona que se une a un grupo de voluntarios, no solo para ayudar, sino también para inspirar y motivar a otros a hacer lo mismo.

Pregúntate: ¿Cómo puedes ser un discípulo activo, llevando el mensaje de Jesús a los demás en tu vida cotidiana?

Conclusión

Concluyendo nuestra reflexión, recuerda que:

1.- Escuchar el llamado de Jesús es abrir tu corazón a su invitación
2.- Dejar lo que nos ata es tomar decisiones radicales para seguir más de cerca su camino.
3.- Convertirse en discípulo activo es llevar el mensaje de Cristo a los demás con valentía.

Este día, renovemos nuestra vocación, recordando que somos llamados a seguir a Jesús y a compartir su amor con el mundo.

Les agradezco por habernos acompañado en esta reflexión. Que la escucha de la palabra de Dios se convierta en una bendición para toda tu jornada.