
Miércoles 23 de abril de 2025
abril 23
✨ 3 Pasos para Vivir el Evangelio Diario
📅 Miércoles 23 de abril de 2025
📖 Evangelio: Lucas 24, 13-35
🕊️ Octava de Pascua
1. Saludo y Presentación Inicial
¡Cristo ha resucitado! Estamos en la Octava de Pascua, este tiempo lleno de gozo en el que la Iglesia celebra como si fuera un solo y gran día de Resurrección. Hoy es miércoles 23 de abril de 2025, y el Evangelio nos lleva al camino de Emaús, donde dos discípulos caminan tristes, desconcertados… hasta que Jesús los alcanza.
2. Introducción Contextualizada
Es el mismo día de la Resurrección. Estos dos discípulos van de Jerusalén a Emaús, unos once kilómetros. Caminan cabizbajos, recordando lo que pasó con Jesús, el que esperaban como redentor, pero que terminó crucificado. Su esperanza está rota.
Y entonces, Jesús se les une. Camina con ellos, pero no lo reconocen. Les explica las Escrituras, les muestra cómo todo tenía que cumplirse. Solo al partir el pan se les abren los ojos. Y cuando lo reconocen… Él desaparece.
Pero lo más fuerte viene después: “¿No ardía nuestro corazón mientras nos hablaba por el camino y nos explicaba las Escrituras?”
Este pasaje es un regalo para los que hemos sentido que Jesús se nos oculta, pero en el fondo, nunca deja de caminar con nosotros.
3. Lectura del Evangelio
📖 Del santo Evangelio según san Lucas: 24, 13-35
El mismo día de la resurrección, iban dos de los discípulos hacia un pueblo llamado Emaús, situado a unos once kilómetros de Jerusalén, y comentaban todo lo que había sucedido.
Mientras conversaban y discutían, Jesús se les acercó y comenzó a caminar con ellos; pero los ojos de los dos discípulos estaban velados y no lo reconocieron. Él les preguntó: “¿De qué cosas vienen hablando, tan llenos de tristeza?”.
Uno de ellos, llamado Cleofás, le respondió: “¿Eres tú el único forastero que no sabe lo que ha sucedido estos días en Jerusalén?”. Él les preguntó: “¿Qué cosa?”. Ellos le respondieron: “Lo de Jesús el nazareno, que era un profeta poderoso en obras y palabras, ante Dios y ante todo el pueblo. Cómo los sumos sacerdotes y nuestros jefes lo entregaron para que lo condenaran a muerte, y lo crucificaron. Nosotros esperábamos que él sería el libertador de Israel, y sin embargo, han pasado ya tres días desde que estas cosas sucedieron. Es cierto que algunas mujeres de nuestro grupo nos han desconcertado, pues fueron de madrugada al sepulcro, no encontraron el cuerpo y llegaron contando que se les habían aparecido unos ángeles, que les dijeron que estaba vivo. Algunos de nuestros compañeros fueron al sepulcro y hallaron todo como habían dicho las mujeres, pero a él no lo vieron”.
Entonces Jesús les dijo: “¡Qué insensatos son ustedes y qué duros de corazón para creer todo lo anunciado por los profetas! ¿Acaso no era necesario que el Mesías padeciera todo esto y así entrara en su gloria?”. Y comenzando por Moisés y siguiendo con todos los profetas, les explicó todos los pasajes de la Escritura que se referían a él.
Ya cerca del pueblo a donde se dirigían, él hizo como que iba más lejos; pero ellos le insistieron, diciendo: “Quédate con nosotros, porque ya es tarde y pronto va a oscurecer”. Y entró para quedarse con ellos. Cuando estaban a la mesa, tomó un pan, pronunció la bendición, lo partió y se lo dio. Entonces se les abrieron los ojos y lo reconocieron, pero él se les desapareció. Y ellos se decían el uno al otro: “¡Con razón nuestro corazón ardía, mientras nos hablaba por el camino y nos explicaba las Escrituras!”.
Se levantaron inmediatamente y regresaron a Jerusalén, donde encontraron reunidos a los Once con sus compañeros, los cuales les dijeron: “De veras ha resucitado el Señor y se le ha aparecido a Simón”. Entonces ellos contaron lo que les había pasado en el camino y cómo lo habían reconocido al partir el pan.
Palabra del Señor. R. Gloria a ti, Señor Jesús.
🪔 Momento de Reflexión
Hoy el Evangelio nos recuerda que Jesús no se queda en la tumba ni se aleja de nuestras dudas. Se hace compañero de camino, aunque a veces no lo veamos. Vamos a dar tres pasos para vivir esta Palabra con el corazón encendido.
✅ Paso 1: Camina aunque no entiendas
Los discípulos no sabían que Jesús estaba vivo. Estaban decepcionados, pero no se encerraron. Caminaron. Hablaron. Se dejaron acompañar.
Así también nosotros: cuando algo nos rompe por dentro, lo más fácil es quedarnos estancados. Pero el primer paso es seguir adelante, aunque duela, aunque no entendamos.
🌀 Imagina a un joven que pierde una gran oportunidad. Se siente frustrado, decepcionado. Pero en vez de aislarse, sigue asistiendo a su grupo, sigue orando. Y en ese caminar, Dios le muestra otra puerta, incluso mejor.
🔍 ¿Estás caminando con fe o te has quedado detenido por la decepción?
✅ Paso 2: Escucha la Palabra con el corazón
Jesús les explicó las Escrituras y, aunque no lo reconocían, algo se encendía en su interior. “¿No ardía nuestro corazón…?”
También a nosotros, cuando escuchamos la Palabra con atención, nos arde el corazón. Dios nos habla, pero hace falta silenciar ruidos, abrir el alma y dejar que la Palabra nos atraviese.
🌀 Imagina a una mujer que, en medio de una crisis familiar, escucha el Evangelio de un domingo. Las palabras parecen escritas para ella. Llora. Y comprende que Dios le está hablando justo ahí.
🔍 ¿Estás dejando que la Palabra de Dios encienda tu corazón?
✅ Paso 3: Reconócelo en la Eucaristía
Cuando Jesús parte el pan, lo reconocen. Allí se revela. Y eso es lo que sigue haciendo en cada Misa. El pan partido no es un símbolo: es Él.
Muchos dicen “yo no siento nada en la Misa”. Pero el problema no está en el altar, sino en la disposición del corazón. Quien se acerca con fe, lo encuentra.
🌀 Imagina a un hombre que ha estado lejos de la Iglesia. Un día entra a Misa casi por impulso. En el momento de la Comunión, algo cambia. Siente una paz que no venía de él. Y entiende: Jesús está allí.
🔍 ¿Reconoces a Jesús cuando parte el pan para ti en cada Eucaristía?
🎯 Conclusión
Hoy, el Evangelio nos invita a:
-
Caminar aunque no entiendas,
-
Escuchar la Palabra con el corazón,
-
Reconocer a Jesús en la Eucaristía.
Camina, escucha y reconoce. Así se enciende el corazón y se renueva la esperanza.
Transforma, enseña y da fruto.
🙏 Despedida Final
Que la escucha de la Palabra de Dios se convierta en una bendición para toda tu jornada. ¡Hasta la próxima!
📽️ Esquema de Proyección: 3 Pasos para Vivir el Evangelio Diario
📅 Viernes 11 de abril de 2025
📖 Evangelio: Juan 18, 1–19, 42
✅ 1. Deja que el dolor te despierte
“Todo se cumplió”
📍 El sufrimiento no es el final, sino la puerta a la redención.
🔍 ¿Qué dolor necesitas abrazar para despertar a lo esencial?
✅ 2. Mira al Crucificado con verdad
“Ahí tienes a tu madre… ahí tienes a tu hijo”
📍 Jesús, incluso en la cruz, nos entrega una nueva familia de fe.
🔍 ¿Qué te está diciendo Jesús desde la cruz hoy?
✅ 3. Responde con fe, no con miedo
“José de Arimatea… pidió el cuerpo de Jesús”
📍 Aunque parecía el final, algunos dieron un paso valiente.
🔍 ¿Qué acto de fe puedes dar hoy, aun en medio del silencio?
✨ Resumen Final:
✅ Deja que el dolor te despierte
✅ Mira al Crucificado con verdad
✅ Responde con fe, no con miedo
¿Qué es 3 Pasos para vivir el Evangelio Diario?
Es un espacio diseñado para acompañarte en el hermoso desafío de descubrir tu vida como un camino. Cada día nos encontramos ante la oportunidad de avanzar y este podcast busca ser una guía basada en la Palabra de Dios para dar tres pasos concretos hacia nuestra meta final: estar con Él.
Con reflexiones claras y accesibles exploramos juntos el Evangelio, desglosándolo en pasos prácticos que te ayuden a vivir más plenamente tu fe. Este esfuerzo no es solo un momento de escucha, sino una invitación a caminar juntos cada día al encuentro con Dios