Miércoles 5 de Febrero de 2025

Reflexión: 3 Pasos para Vivir el Evangelio Diario
Evangelio: Lucas 9, 23-26
4ª Semana del Tiempo Ordinario
Miércoles 5 de Febrero de 2025
Fiesta de San Felipe de Jesús

1. Saludo y Presentación Inicial

Hola, queridos hermanos. Bienvenidos a un nuevo episodio de “3 Pasos para Vivir el Evangelio Diario”. Hoy Miércoles 5 de Febrero de 2025 celebramos la fiesta de San Felipe de Jesús, el primer mártir mexicano, un testimonio vivo de entrega total a Cristo. Reflexionemos juntos sobre cómo vivir el llamado de Jesús a seguirle con valentía y fidelidad.

2. Introducción Contextualizada

Hoy la Iglesia nos invita a meditar en el Evangelio según san Lucas, capítulo 9, versículos 23 al 26. En este pasaje, Jesús nos llama a tomar nuestra cruz cada día y seguirle, recordándonos que quien quiera salvar su vida la perderá, pero quien la pierda por él la salvará. Es un mensaje desafiante, pero esencial en nuestra vida cristiana. San Felipe de Jesús encarnó esta enseñanza al aceptar el martirio con valentía, confiando plenamente en la promesa de Cristo.

Escuchemos con atención la Palabra de Dios.

3. Lectura del Evangelio

El que pierda su vida por mí, ése la encontrará.

Del santo Evangelio según san Lucas: 9, 23-26

En aquel tiempo, Jesús le dijo a la multitud: “Si alguno quiere acompañarme, que no se busque a sí mismo, que tome su cruz de cada día y me siga. Pues el que quiera conservar para sí mismo su vida, la perderá; pero el que la pierda por mi causa, ése la encontrará. En efecto, ¿de qué le sirve al hombre ganar todo el mundo, si se pierde a sí mismo o se destruye?

Por otra parte, si alguien se avergüenza de mí y de mi doctrina, también el Hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga revestido de su gloria y de la del Padre y de la gloria de los santos ángeles”.

Palabra del Señor. R. Gloria a ti, Señor Jesús.

4. Momento de Reflexión: Invitación a Vivir los 3 Pasos

Jesús nos llama a seguirle con fidelidad, a no avergonzarnos de él y a confiar en la vida eterna. Veamos cómo podemos aplicar este mensaje en nuestra vida diaria con tres pasos concretos.

Paso 1: Aprende a negarte a ti mismo

La vida cristiana implica renunciar a nuestros propios intereses para seguir la voluntad de Dios. Negarse a sí mismo no significa despreciarse, sino elegir el amor y la verdad por encima del egoísmo y la comodidad. En los Evangelios, vemos cómo Jesús constantemente elige la voluntad del Padre, incluso cuando ello implica sacrificio.

Imagina… Una joven que sueña con una carrera exitosa, pero descubre que Dios la llama a servir en misiones. Aunque al inicio siente temor, decide confiar en él y deja atrás sus planes personales para dedicarse a los más necesitados. Con el tiempo, experimenta una felicidad que nunca habría encontrado persiguiendo solo sus deseos.

Pregúntate: ¿En qué áreas de tu vida necesitas renunciar a algo para seguir mejor a Cristo?

Paso 2: Toma tu cruz cada día

Jesús nos llama a aceptar con amor las dificultades de la vida. No se trata solo de soportarlas, sino de abrazarlas con fe, sabiendo que nos unen más a él. La cruz es el camino a la gloria, como lo fue para Jesús y para los santos.

Imagina… Un padre de familia que enfrenta una enfermedad difícil. En lugar de desesperarse, decide ofrecer su sufrimiento a Dios y vivir con esperanza. En su dolor, aprende a valorar más el amor de su familia y se convierte en testimonio de fe para los demás.

Pregúntate: ¿Cómo puedes llevar con amor y paciencia las dificultades de cada día?

Paso 3: Vive sin avergonzarte de Cristo

El mundo nos presiona a ocultar nuestra fe, pero Jesús nos llama a ser testigos valientes. No podemos callar la verdad ni negar a Aquel que nos ha dado la vida eterna. San Felipe de Jesús no renegó de su fe, sino que la proclamó hasta el final.

Imagina… Un joven que en su escuela es criticado por rezar antes de comer. Al principio siente vergüenza, pero con el tiempo se da cuenta de que su ejemplo inspira a otros a vivir su fe con valentía.

Pregúntate: ¿Tienes miedo de mostrar tu fe en público? ¿Cómo puedes ser un testigo más valiente de Cristo?

5. Conclusión

Hoy hemos reflexionado sobre tres pasos esenciales para seguir a Cristo:

1. Negarte a ti mismo: Elegir la voluntad de Dios sobre nuestros propios intereses.
2. Tomar tu cruz cada día: Aceptar con amor las dificultades de la vida.
3. Vivir sin avergonzarte de Cristo: Ser testigo valiente de la fe.

Si vivimos estos pasos, seremos verdaderos discípulos de Jesús y, como San Felipe de Jesús, nuestra vida dará testimonio del amor de Dios.

6. Despedida Final

Gracias por acompañarnos en esta reflexión. Que la escucha de la Palabra de Dios se convierta en una bendición para toda tu jornada. ¡Hasta la próxima!