Sábado 10 de mayo de 2025 – Día de las Madres

🎧 3 Pasos para Vivir el Evangelio Diario

📅 Sábado 10 de mayo de 2025
📖 Evangelio: San Lucas 1,39-56
🕊️ Solemnidad de la Maternidad

1. Saludo y Presentación Inicial

¡Hola! Bienvenido a “3 Pasos para Vivir el Evangelio Diario”. Hoy es domingo 12 de mayo de 2025, y celebramos con gozo el Día de las Madres. Que esta jornada sea una oportunidad para agradecer, bendecir y reconocer la maternidad como un camino concreto de santidad. Porque ser madre —biológica o espiritual— es ser reflejo del rostro tierno, fuerte y fiel de Dios.

2. Introducción Contextualizada

El Evangelio de este día nos lleva a una escena profundamente humana y, al mismo tiempo, cargada de mística: María, recién embarazada por obra del Espíritu Santo, corre a ayudar a su prima Isabel. No se encierra en su misterio, no se aísla. Sale, camina, sirve. Y en ese encuentro, las dos mujeres se bendicen mutuamente, y María entona el cántico del Magníficat, una alabanza desbordante desde la humildad.

En esta escena, contemplamos a María como madre en salida, madre en comunión, madre en santidad. A través de ella, Dios nos muestra que la maternidad no es solo biología, sino vocación de amor, entrega y fe vivida día a día.

3. Lectura del Evangelio: San Lucas 1,39-56

En aquellos días, María se encaminó presurosa a un pueblo de las montañas de Judea, y entrando en la casa de Zacarías, saludó a Isabel. En cuanto ésta oyó el saludo de María, la criatura saltó en su seno.

Entonces Isabel quedó llena del Espíritu Santo, y levantando la voz, exclamó: “¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo, para que la madre de mi Señor venga a verme? Apenas llegó tu saludo a mis oídos, el niño saltó de gozo en mi seno.

Dichosa tú, que has creído, porque se cumplirá cuanto te fue anunciado de parte del Señor”.

Entonces dijo María: “Mi alma glorifica al Señor y mi espíritu se llena de júbilo en Dios, mi salvador, porque puso sus ojos en la humildad de su esclava.

Desde ahora me llamarán dichosa todas las generaciones, porque ha hecho en mí grandes cosas el que todo lo puede. Santo es su nombre, y su misericordia llega de generación en generación a los que lo temen.

Él hace sentir el poder de su brazo: dispersa a los de corazón altanero, destrona a los potentados y exalta a los humildes. A los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide sin nada.

Acordándose de su misericordia, viene en ayuda de Israel, su siervo, como lo había prometido a nuestros padres, a Abraham y a su descendencia, para siempre”.

María permaneció con Isabel unos tres meses, y luego regresó a su casa.

Palabra del Señor. R. Gloria a ti, Señor Jesús.

4. Momento de Reflexión

Vamos a descubrir, desde este Evangelio, tres pasos para vivir la maternidad como un camino de santidad, con la fuerza, la ternura y la fe que brotan del corazón de Dios.

✅ Paso 1: Vive tu maternidad como un regalo diario para los demás

🪔 Evangelio sencillo:
“María se fue rápido a la montaña a visitar a Isabel.” No se quedó quieta pensando en ella misma. Salió de casa, con Jesús en su vientre, para ayudar a su prima. Lo primero que hizo María como mamá fue servir. Ser mamá es eso: salir de ti misma y estar lista para los demás.

🔁 Así pasa en tu vida:
Una mamá no es buena porque sabe todo o porque nunca se equivoca. Es buena porque se da todos los días: cuando no duerme bien, cuando cocina, cuando da un abrazo sin que se lo pidan. Ahí, en lo de todos los días, es donde Dios ve el amor verdadero.

🌱 Imagina esto:
Una mujer que trabaja todo el día, y al llegar a casa encuentra a sus hijos cansados y de mal humor. Aunque ella también está muy cansada, los escucha, los abraza, les da paz. Nadie aplaude eso. Pero Dios sí lo ve. En ese momento, ella está caminando como María: siendo mamá con amor.

❓ ¿Te das cuenta que en lo que haces cada día estás respondiendo al amor de Dios?

✅ Paso 2: Vive tu maternidad unida a Dios y a los que amas

🪔 Evangelio sencillo:
Cuando María llegó con Isabel, el bebé saltó en su vientre y las dos se llenaron del Espíritu Santo. Ser mamá, con fe, no solo une a la madre con su hijo: también une corazones, acerca a las personas, trae la alegría de Dios. María e Isabel no se quejan ni se encierran en sus problemas. Se abrazan, se bendicen, se acompañan.

🔁 Así pasa en tu vida:
Hoy todo parece dividir: los enojos, las prisas, el orgullo. Pero una mamá puede unir. Es la que enseña a pedir perdón, a volver a hablar, a seguir creyendo. Ser mamá es colaborar con Dios: dar vida, cuidar la vida, y ofrecerla con amor.

🌱 Imagina esto:
Una mamá que no ha hablado con su hija desde hace años, un día toma el teléfono y dice: “Te extraño”. Esa llamada, con humildad y cariño, cambia todo. Abre una puerta, sana heridas, empieza de nuevo. Ese gesto sencillo, lleno de amor, muestra lo que es ser mamá con el corazón de Dios.

❓ ¿Estás buscando unir a los tuyos y hacer presente el amor de Dios en tu casa?

✅ Paso 3: Da gracias a Dios por lo que hace en ti, aunque nadie lo note

🪔 Evangelio sencillo:
María cantó: “Mi alma alaba al Señor”. No habló de lo buena que era, sino de lo bueno que es Dios. Ella sabía que era pequeña, pero también sabía que Dios la había mirado con amor. Por eso cantó, porque reconoció que todo venía de Él.

🔁 Así pasa en tu vida:
Muchas mamás hacen todo en silencio: no hay aplausos, ni premios, ni agradecimientos. Pero Dios lo ve todo y se alegra. Y cuando una madre, aunque esté cansada, le da gracias a Dios con el corazón, esa oración llega al cielo y Dios se gloría en ella.

🌱 Imagina esto:
Una mamá que quedó viuda y sola, pero no se rindió. Con mucho esfuerzo sacó adelante a sus hijos. Nunca fue reconocida públicamente. Pero cada noche, antes de dormir, le dice a Dios: “Gracias por darme fuerza hoy”. Esa oración sencilla es su canto. Ahí, Dios ha hecho maravillas.

❓ ¿Te das cuenta de todo lo que Dios ha hecho en ti, incluso cuando nadie más lo nota?

Hoy el Evangelio te invita a:

✅ Vivir tu maternidad como un regalo para los demás, como María que salió de su casa para ayudar con amor.
✅ Reconocer que tu maternidad une corazones, como el encuentro de María e Isabel lleno del Espíritu de Dios.
✅ Dar gracias a Dios por lo que ha hecho en ti, como María que cantó desde su pequeñez y su confianza.

Vive, reconoce y alaba.
Porque en cada cosa que haces con amor, aunque nadie lo vea, Dios está actuando.
Tu vida de madre, en lo sencillo y en lo oculto, hace brillar la santidad de Dios en este mundo.

6. Despedida Final

Que la escucha de la Palabra de Dios se convierta en una bendición para toda tu jornada.
¡Feliz día a todas las mamás! ¡Hasta la próxima!